Felicitas Alvite, conocida mediáticamente como “La Toretto”, fue trasladada este jueves al Penal de Magdalena, luego de una resolución judicial que dispuso su salida de la alcaidía de Melchor Romero, donde se encontraba detenida desde hace más de un año por atropellar y matar al motociclista Walter Armand durante una picada ilegal.
 

La decisión fue tomada por el juez Claudio Bernard, del Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de La Plata, quien argumentó que la permanencia de Alvite en una alcaidía excedía el límite legal de seis meses. Así, ordenó su derivación a una cárcel del Servicio Penitenciario Bonaerense, específicamente de máxima seguridad.
 

La medida generó fuerte rechazo por parte de la defensa, que insiste en que existe una resolución firme de la Cámara de Casación que ordena el cumplimiento de una prisión domiciliaria para Alvite. “No puede ignorarse una orden de Casación por un tecnicismo. Es como decir que no se puede cumplir una orden porque falta un sello”, argumentaron los abogados en el escrito presentado esta semana.
 

El abogado defensor Flavio Gliemmo, además, presentó un habeas corpus para solicitar la excarcelación de la joven, denunciando que su detención en una prisión común es “inconstitucional” y representa un “castigo anticipado” cuando aún no existe una condena firme. En ese sentido, recordaron que Alvite se encuentra en estado de inocencia, por lo que corresponde un tratamiento acorde a los estándares internacionales de derechos humanos.

Durante su traslado, la joven sufrió un ataque de pánico y debió recibir asistencia médica. Según informaron fuentes judiciales, continúa medicada y bajo monitoreo de salud mientras se espera la resolución de Casación, que deberá definir si continuará detenida en prisión o podrá cumplir arresto domiciliario mientras espera el juicio oral.

El caso sigue generando conmoción social y reacciones encontradas entre familiares de la víctima y sectores que exigen justicia, y quienes consideran excesiva la prisión preventiva de la acusada.