El caso sucedió el martes por la tarde en calle San Luis cuando vecinos y comerciantes de la zona llamaron a la Policía al advertir que un menor estaba encerrada dentro de un auto estacionado y que la alarma no paraba de sonar.

Los denunciantes manifestaron que en un momento de la tarde comenzó a sonar la alarma de un auto y el fuerte sonido se mantuvo durante más de 10 minutos, algo que llamó la atención.

Cuando algunos comerciantes salieron a ver que pasaba observaron que dentro del vehículo estaba un nene y no tenía ninguna ventilación.

Por este motivo, dieron aviso a la Policía que, tras montar un operativo, lograron que el menor salga y frente a los efectivos pidió tomar agua "porque no se sentía bien". 

“Cuando salió, estaba re asustado. El nene vino a mi negocio a pedirnos agua porque estaba acalorado. Después se quedó con la policía hasta que llegó la madre”, contó el empleado de un local.

Lo que llamó la atención es que cuando la mamá llegó dio una insólita justificación y hasta se mostró enojada por la actuación de los agentes policiales.

Una vecina contó en un medio radial cómo actuó la mamá: “Dijo que lo dejó durmiendo adentro del auto porque iba a hacer rápido y no quería despertarlo”.

“Estaba enojada por el tema de la traba. La policía destrabó el auto para sacar al nene asustado y se ve que la enojó eso”, señaló otro vecino.