Según relataron testigos de la situación, el animal se encuentra atado en un rincón, desabrigado y expuesto al frío, con claros signos de violencia física, incluyendo cortes en el cuello y lesiones visibles que serían consecuencia de golpes reiterados.

“Lo tiene a la intemperie, con frío, atado con una soga. Tiene marcas en el cuello y lo ahorca. Es urgente que lo rescaten”, expresó uno de los denunciantes, quien, al igual que otros vecinos, prefiere mantener el anonimato por temor a represalias del dueño de la casa.

La situación fue denunciada de forma informal por quienes aseguran haber visto episodios de maltrato constante y negligencia hacia el animal. Piden intervención urgente de grupos proteccionistas, organizaciones de defensa animal y autoridades competentes, ya que temen por la vida del perro.

Vecinos del barrio ya se han comunicado con activistas y esperan una pronta respuesta: “No podemos seguir viendo cómo sufre. Necesita ser rescatado ya”, concluyó una vecina conmovida.